marți, 1 decembrie 2009

On the road

Resulta que el abuelo del abuelo del abuelo (unos cuantos abuelos, pero tampoco tantos) de mi amigo rumano salió de su verde aldea tribal dacia y se hizo un costa-costa hasta este saltus vasconum del norte de la Tarraconense, cruzándose casi toda la Uniunea Romană como por un schengen, en euros, en trenes de alta velocidad, más o menos. Todo quedaba en casa. Incluso fíjate que el presidente de entonces era muy exótico, porque se llamaba Trajanus y casi como si fuera de Hawai, porque era el primer presidente de provincias (andaluz). Bueno, ellos decían "calzadas", "denarios", "emperador", ésa era su jerga. Pues mira por dónde el intrépido dacio conoció a mi abuelo. Déjame que te siga contando. Resulta que...

Niciun comentariu:

Trimiteți un comentariu